"Este libro nace desde una perspectiva feminista, y como tal, viene a incomodar. A proponer reformulaciones de códigos sociales, no sólo con respecto a la menstruación como tal, sino que junto a ella, a la percepción cultural de lo abyecto, entendido, tal como lo propone la filósofa y psicoanalista Julia Kristeva, como aquello que se decide expulsar socialmente, orillando, dejando en el margen de lo aceptado, calificándolo de no deseado, o más aún, de repulsivo. Con Tejido Conectivo Líquido las artistas Valentina Inostroza Bravo, Estela Morales y Martina Pedreros comparten el proceso de investigación llevado a cabo durante cuatro meses en torno a la menstruación como materia de experimentación, sujeto artístico y práctica para la autorreflexión. Mediante estos tres ejes, las artistas ponen la menstruación sobre la mesa y hacen de lo socialmente repulsivo un mensaje político, transformador de realidades e imaginarios." Sangre sobre la mesa (Nota editorial) Por Daniela Hermosilla Z.
